¿Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo?Y por el vestido, ¿por qué os afanáis? Considerad los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan; pero os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió así como uno de ellos.Y si la hierba del campo que hoy es, y mañana se echa en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más a vosotros, hombres de poca fe? No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos?Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas. Mateo 6:27-32
Muchas veces pasamos los días pensando en lo que queremos alcanzar a futuro sin haber terminado siquiera lo que nos ocupa en el presente.
Una característica nuestra como seres humanos es que todo lo queremos en nuestro tiempo olvidando que el dueño del tiempo es Dios.
La fe es un asunto de espera y paciencia; y ella es el fruto con el que Dios trabaja en nosotros no para hacernos desesperar sino para que en el momento indicado recibamos lo que es nuestro.
Paso a paso. Por mucho que nos esforcemos no podemos adelantar el tiempo de Dios.
Si los lirios del campo no tienen fe porque no están capacitados para tenerla; si las aves no tienen fe porque no está en el diseño de Dios que la tengan, porqué a nosotros que si disfrutamos de esa fe nos cuesta tanto entender que Dios tiene el control de todas nuestras necesidades!
Él sabe de qué cosas estás necesitado y de qué cosas lo estarás.
Todo en su tiempo. Sólo ten fe!
Bendiciones
Michael