El nacimiento de Jesucristo fue así: Estando desposada María su madre con José, antes que se juntasen, se halló que había concebido del Espíritu Santo. José su marido, como era justo, y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente. Y pensando él en esto, he aquí un ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es. Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados. Todo esto aconteció para que se cumpliese lo dicho por el Señor por medio del profeta, cuando dijo: He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo, Y llamarás su nombre Emanuel , que traducido es: Dios con nosotros .
S. Mateo 1:18-23 RVR1960
José, no entendió al principio, pero Dios tiene sus maravillosas formas de hacernos entender. Y si tiene que mandar un ángel, el Señor lo hace, con tal de que sus propósitos divinos se cumplan.
Hoy vamos a levantarnos creyendo en un Dios cercano. Un Dios, que no pasa por alto ni se olvida de nuestras situaciones de vida. Hoy, con fe y esperanza, adoremos, alabemos y animémonos, pues no estamos solos. Digamos a viva voz: “Emanuel, Dios con nosotros”
Ánimo, si ” Emanuel ” está con nosotros, todo va a estar bien.
P. Hugo Aguilar