Y ustedes no han recibido un espíritu que los esclavice al miedo. En cambio, recibieron el Espíritu de Dios cuando él los adoptó como sus propios hijos.Ahora lo llamamos «Abba, Padre». 16 Pues su Espíritu se une a nuestro espíritu para confirmar que somos hijos de Dios. Romanos 8:15 – 16 (NTV)
¿Cuántas veces no tenemos miedo? ¿Cuántas veces no nos hemos dejado dominar por el temor? Este mundo “promueve” el temor, sea porque las circunstancias son adversas, sea porque se demanda de nosotros cosas muy pesadas, sea porque nos inspiran temor con sus palabras o actitudes, etc. Es muy fácil y una de las emociones más comunes sentir miedo o temor. Pero tú y yo, si somos hijos de Dios, no estamos esclavizados al miedo, no tenemos que vivir en esa misma actitud, andando por todo lado con temor. NO! El Espíritu que hemos recibido no es uno de temor, es el Espíritu de Dios pues fuimos adoptados y somos hijos de Dios, del Dios altísimo, del soberano, del que controla el mundo, al que nada lo toma por sorpresa. Este Espíritu nos confirma que somos hijos de Dios y podemos estar seguros en El. Así que, ya no temas…. confía en El, tienes un Padre excelente, el Padre que tiene control de todo.
Escrito por: Rebekka Otremba