Mas antes, oh hombre, ¿quién eres tú, para que alterques con Dios? ¿Dirá el vaso de barro al que lo formó: ¿Por qué me has hecho así? ¿O no tiene potestad el alfarero sobre el barro, para hacer de la misma masa un vaso para honra y otro para deshonra? Romanos 9:20-21
Dios nos ha llamado para ser un vaso de honra y no de deshonra. Para ello debemos reconocer que Dios es quien debe tener la dirección de nuestra vida, pues tal vez en algún momento pensamos que la dirección es hacia donde pensamos mejor pero para Dios el camino es hacia una dirección que puede ser un camino difícil pero si Él está con nosotros estaremos confiados.
Vaso de honra es dejarse moldear por la mano de Dios y permitirle pasar por fuego nuestra vida para que ese vaso sea perfecto.
Dios quiere hacerte de un vaso de honra para su servicio conociendo que si El dirige, todo nos sirve para bien.
Bendiciones Julio Leiva