13 Ustedes son la sal de la tierra; pero si la sal se ha vuelto insípida, ¿con qué se hará salada otra vez? Ya no sirve para nada…14 Ustedes son la luz del mundo. Una ciudad situada sobre un monte no se puede ocultar… 16 Así brille la luz de ustedes delante de los hombres, para que vean sus buenas acciones y glorifiquen a su Padre que está en los cielos Mateo 5, 13-16
La Biblia habla que los Hijos de Dios somos luz y sal de este mundo. El lenguaje utilizado en la Escritura denota que nosotros y SOLO NOSOTROS somos luz de este mundo, eso significa un gran privilegio pero una gran responsabilidad. Estamos llamados, nosotros exclusivamente, a ser testimonio vivo de la verdad de Jesucristo para muchos otros.
Además, al llamarnos Sal esto denota muchos aspectos interesantes:
Primero, en ese contexto la sal era utilizada como pago, la sal era muy valiosa; de la misma manera nosotros somos muy preciados delante del Señor.
También, la sal servía para preservar y sanar, nosotros debemos preservar el evangelio de Jesús y hemos sido llamados para alcanzar y sanar a muchos de un mundo perdido.
Finalmente, la sal le da el gusto perfecto a los alimentos, ni muy poquita sal ni mucha es necesaria para condimentar. Por lo tanto, el cristiano debe entender que estamos en este mundo, pero no pertenecemos a este mundo, debemos vivir una vida balanceada entre lo natural y lo espiritual; una vida que agrade a Dios en todo.
Pastor Morris
Bendiciones