Pues yo sé los planes que tengo para ustedes, dice el señor, son planes para lo bueno y no para lo malo, para darles un futuro y una esperanza. Jeremías 29:11 (NTV)
Pasajes como este de Jeremías son súper alentadores, Dios Dice: “Yo se los planes que tengo acerca de vosotros” ¿no es maravilloso saber que Dios tiene un plan para ti y para mí? ¡Claro que sí! Dios usó la vida de Jeremías para dejar por escrito la poderosa verdad que dice: ¡YO TENGO UN PLAN! Pero no cualquier plan, los planes de Dios para nosotros son planes de bien, ¿qué quiere decir esto? Que Dios pensó, planificó, escribió y trazó un claro y preciso plan cuyo fin solo es uno, el bien.
El bien en la vida, es uno de los resultados de caminar en la historia que Dios ha planeado para nosotros, por eso el salmista decía: “el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida” (salmo 23:6) el salmista entendió que no había nada mejor que vivir en los planes de Dios y no en los propios. Además, los planes de Dios son los planes de mi papá y de tu papá, es decir, el no solamente sacó su tiempo para planearnos si no que al hacernos nacer nos acompaña en la vida para guiarnos y así garantizar el éxito de llevarnos al bien que ha planeado para nosotros.
Mi intención en este día, es que comprendamos juntos que no nacimos para un fin desastroso, que Dios no te hizo nacer para que viviéramos inmersos diariamente en una vida de sufrimiento, confusión y desastre, más aun, Dios es tu padre y el mío y lo que ha planeado para nosotros es sencillamente asombroso.
Toma un minuto y dile a tu padre celestial que quieres hacer del plan que él planeo para ti, tu propio plan, que quieres vivir cada uno de tus minutos horas y días en la maravilloso historia que el planeo para ti. Nadie que haya hecho esta oración se ha arrepentido de haberla hecho. Seamos la generación que anhela y sueña por vivir cada día los planes de Dios.
¡Apasionate!
Escrito por Michael Bermudez