Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios. 1 Juan 3:1
Dios no sólo nos ofrece la posibilidad de mantener una relación personal con Él, sino también de vivir felices, y formar parte de su familia.
Sólo la fe nos introduce en los privilegios de esta familia, en donde tenemos vida eterna, somos hechos hijos de Dios, tenemos paz, amor, seguridad, protección y muchas bendiciones más de vivir una vida como solo Dios nos la puede dar.
Animémonos los unos a los otros, para que más personas formen parte de esta gran familia y podamos disfrutar juntos por la eternidad de vivir junto a Jesucristo.
Dios te bendiga.