La boda masiva celebrada en la 56 ª Entrega Anual del Grammy el domingo por la noche ha desatado la polémica y ha sido criticada por muchos como “una maniobra política para promover el matrimonio entre personas del mismo sexo”.
La boda masiva involucró 33 parejas homosexuales y heterosexuales, oficiada por la cantante y actriz Queen Latifah y con Madonna como testigo. Macklemore & Ryan Lewis realizó una interpretación acompañado de Mary Lambert el tema “Same Love”, canción en pro de los derecho homosexuales, sin embargo la canción ha sido criticada como inapropiada para los premios de la música.
Otro de los actos inesperados fue durante la presentación del matrimonio de Beyoncé y Jay Z, en el que la estrella del pop apareció en el escenario con un atrevido body negro con transparencias, medias con lunares y pelo mojado.
A esto se le agregó Katy Perry -hija de pastores evangélicos- con una simulación de la Inquisición de Iglesia Católica que ejecutó en contra de las brujas. En la presentación se pudo apreciar el simbolismo satánico mostrando un rechazo de la cantante hacia los valores cristianos que fueron inculcados por sus padres.
Era de esperar que la cantante cristiana Natalie Grant, con el sólo el hecho de abandonar la ceremonia de los Grammys tempranamente era más que evidente que ella estaba protestando contra los acontecimientos.
La cantante publicó en su Facebook: “Salí de los Grammy muy temprano. Tuve muchos pensamientos, es mejor que la mayoría permanezcan en mi cabeza. Pero voy a decir esto: Nunca he estado más honrada por cantarle a Jesús y para Jesús. Y nunca había estado tan segura sobre el camino que he elegido”.
Por tal comentario decenas de activistas homosexuales utilizaron los medios sociales para atacarla. Sin embargo, cientos de personas han apoyado su postura, elogiándola por mantener su moral y su fe a pesar de la agenda liberal que fue impulsada en los premios Grammy.
Sin embargo, la cantante evangélica declaró a sus seguidores:
“He tratado de leer todos los comentarios en mi post anterior y no puedo responder a todos. La mayoría de ustedes siempre han sido un gran apoyo y alentador para mí y lo agradezco. No me entristece cuando la gente discute, juzga e insulta. Yo no voy a participar en discusiones, pero sólo hay un par de cosas que quiero decir:
Nunca dije que salí por una actuación en concreto (de los Grammys). Sólo dije que me fui temprano. Nunca hice comentarios sobre alguna actuación, sólo dije que tenía muchos pensamientos de todo el espectáculo, y que era mejor que permanecieran en mi cabeza y allí es donde los dejaré. Así que aquellos que dicen que condené una actuación, pero que toleré otras es evidente que no leyeron todo el mensaje.
Lo que he dicho es: Me siento honrada de ser parte de la comunidad de la música cristiana. He tenido muchas personas a lo largo de mi carrera que me preguntan por qué nunca he tratado de incursionar a la música comercial y anoche (domingo) fue un hermoso recordatorio de que me gusta cantar sobre Jesús y para Jesús.
No he juzgado a nadie. No odio a nadie. Y creo que cada persona ha sido creada a imagen de Dios. Nunca voy a estar en una esquina de la calle moviendo pancartas, no voy a usar mi plataforma para discusiones políticas que sólo dividen y no unen. Voy a seguir orando para que mi vida sea un mensaje. Tengo mis propias convicciones personales por las cuales vivo, y voy a seguir preocupándome por mi propia salvación con temor y temblor ante el Señor. (Filipenses 2:12).
Tuve el honor de ser nominada a 2 premios Grammy anoche. Estoy tan agradecida de que NARAS y Los Grammys sigan reconociendo la contribución que el evangelio y la música cristiana hacen al mundo. Y estoy tan emocionada por los que ganaron en mis categorías. Y puedo decirlo con toda sinceridad.
Mi último pensamiento:
“Porque no me avergüenzo del evangelio de Jesús, porque es poder de Dios que trae la salvación para todos los que creen, Romanos 1:16”.
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